Dueños de nosotros mismos

Intento practicar la plena conciencia porque sufro de ansiedad, así como intento ser minimalista porque soy una persona muy desordenada. Soy disperso la mayor parte del tiempo, en ocasiones me cuesta concentrarme o enfocarme en lo que estoy haciendo en el momento.

Que sea un practicante de meditación no significa que sea una persona zen. Significa que soy una persona ansiosa que intenta calmarse y volver al momento presente.

El primer milagro, para mí, sucedió cuando me volví consciente de mi situación: darme cuenta de que me sentía ansioso cuando me sentía ansioso, darme cuenta de que me sentía estresado cuando me sentía estresado, darme cuenta de que me sentía deprimido cuando me sentía deprimido, dejar de estar en piloto automático sin estar presente.

El ser consciente de cómo nos sentimos, aunque parezca y suene sencillo, es el primer gran paso, precisamente por eso, porque estás siendo consciente.

No sé si algún día deje de sentirme estresado, ansioso o deprimido, lo que sí sé, es que con el paso del tiempo y a través de la práctica de la meditación, quizás pueda ser cada vez más consciente de mi cuerpo, de mis sensaciones, de mis emociones, de mis sentimientos, de mis preocupaciones, de mis ansiedades, temores, inseguridades.

Cuando somos conscientes todo cambia. Cambia porque podemos ahora intentar entender, comprender y dejar ir. Somos conscientes de que nos estamos lastimando o estamos lastimando a otras personas y nos proponemos cambiar nuestras acciones. Somos conscientes de que quizás vamos demasiado rápido y necesitamos desacelerar el paso. Somos conscientes de que nuestra actitud no es la mejor y podemos modificarla. Somos conscientes de que lo que estamos consumiendo quizás no lo necesitamos realmente, no lo queremos realmente.

Dice Thich Nhat Hanh en su libro El milagro de mindfulness: “La plena conciencia es el milagro que nos permite ser dueños de nosotros mismos y recuperar la plenitud… Es el milagro que te permite en un instante unir tu mente dispersa y recuperar la plenitud para vivir cada minuto de tu vida.”